jueves, 8 de diciembre de 2011

PATRONA DE LA INFANTERÍA ESPAÑOLA. "EL MILAGRO DE EMPEL"

Hoy día 8 de Diciembre, celebramos el día de la Virgen Inmaculada Concepción. Día que los católicos celebramos con devoción.

La Infantería española, tiene el gran honor de tener como Patrona a nuestra Virgen María Inmaculada. Hoy en este artículo quiero contar una emocionante historia verídica que ocurrió hace más de 400 años y de dónde viene el hecho de que la Virgen María sea la Patrona de nuestra Infantería.

El 7 de Diciembre de 1585, el Tercio Viejo de Zamora a las órdenes del Maestre Don Francisco de Bobadilla, combatía por España en Flandes.

La isla de Bommel, situada entre los ríos Mosa y Wall, era el reducto defendido por el Tercio Viejo Español.

Bloqueados por completo por la escuadra del Almirante Holak. Cinco mil hombres guarnecían la isla, "cinco mil españoles que eran a la vez cinco mil infantes y cinco mil caballos ligeros y cinco mil gastadores y cinco mil diablos", como dijera de ellos un almirante francés.

Sometido a la artillería de la escuadra, la de un fuerte holandés y la de posiciones herejes situadas en las riberas del Mosa. El Tercio Español estaba totalmente cercado por las aguas, sin escapatoria posible.

El bloqueo se estrecha cada día más; ya no quedan víveres, ni pertrechos de guerra, ni ropas secas. Sólo queda frío, agua, barro y deseperanza.

Consciente de la penosa situación de los españoles, Holak propone a los españoles una rendición honrosa.

La respuesta de Bobadilla es inmediata "Los Infantes Españoles prefieren la muerte a la deshonra, ¡¡ya hablaremos de capitulación después de muertos!!".

Entre tanta calamidad, un soldado del Tercio Español, cavaba una trinchera "más para tumba que para guarecerse" cuando tropezó con una tabla flamenca pintada, en vivos colores, era la imagen de la Inmaculada Concepción.

Comenzó el soldado a gritar y acudieron sus compañeros que, colocando la imagen sobre la Bandera Española, a modo de altar, cayeron todos de rodillas cantando la Salve.

El Maestre Bobadilla, considerando el hecho como señal de protección divina, arengó a sus tropas a seguir resistiendo:

"¡Soldados! El hambre y el frío nos llevan a la derrota, pero la Virgen Inmaculada viene a salvarnos.

Al atardecer, la escuadra Holandesa al mando de Holak, la artillería del fuerte y las tropas herejes en la margen del Mosa, se preparaban para dar el golpe definitivo a los españoles al día siguiente.

Fué entonces cuando ocurrió lo impensable, un viento huracanado e intensamente frío se desató helando las aguas del río Mosa. De madrugada los Españoles, comprobaron con asombro que era posible caminar por la superficie del río.

Sin perder un momento, cogieron las armas y se lanzaron hacia la flota Holandesa dispuestos a quitarse el frío con sangre y fuego. Cayeron como demonios sobre los buques Holandeses, dando cuchilladas, pistoletazos y estocadas a todo cuanto se movía, dispuestos a cobrarse con creces las molestias del horrible asedio.

En el fuerte Holandés, así como entre las tropas herejes, empezó a cundir el pánico, al percatarse de lo que estaba sucediendo a su flota, que resultó totalmente derrotada, capturando el Tercio Español una decena de naves, así como numeroso armamento de artillería y prisioneros.

Al amanecer sin perder ni un minuto, Don Juan de Bobadilla dispuso el Tercio en formación de combate y marchó sobre el fuerte Holandés.

Los soldados españoles aún tenían rabia contenida que desahogar contra los artilleros holandeses que les habían estado masacrando desde allí.

Aquella mañana la FURIA ESPAÑOLA parecía no tener medida ni final.

En cuanto el fuerte cayó, que fue en un santiamén, todas las tropas holandesas en las márgenes del Mosa huyeron precipitadamente.

En la desbandada tras la derrota el comandante hereje maldecía a Dios llamándole Español, afirmaba que "Dios se había hecho Español, al obrar tan grande milagro para derrotarle".

Aquel mismo día, entre vítores y aclamaciones la Inmaculada Concepción fue proclamada Patrona de los Tercios de Flandes, y posteriormente de toda la Infantería Española, patronazgo que perdura hasta nuestros días.

Me ha parecido que en un día tan señalado como el de hoy, recordar una historia como ésta, es hacer incampié en la grandeza del pueblo Español y decir que nuestra historia no hay que olvidarla, somos un país con una larga trayectoria y siempre hemos destacado por nuestra raza y grandeza.